Se conmemoró el Día del Veterano y los Caídos en la Guerra de Malvinas

Con la presencia del Intendente Camilo Etchevarren, en el Cementerio de nuestra ciudad se conmemoró el Día del Veterano y los Caídos en la Guerra de Malvinas. Se encontraban presentes Ex Combatientes y familiares de los mismos, integrantes del Gabinete Municipal, Concejales, Consejeros Escolares, autoridades Eclesiásticas, miembros del Club Argentino de Servicio 2 de Abril y vecinos.

El acto se inicio con la entonación del Himno Nacional Argentino y la Marcha de Malvinas.

Posteriormente el Intendente Camilo Etchevarren y Zulma Nogueira de Silva,  colocaron una palma de laureles al pie del Monumento que recuerda a los caídos en Malvinas. Lo mismo hicieron los Ex Combatientes Daniel Fontana y Leonardo Rondi, junto a Luis Alberto Silva (padre del Soldado José Luis Rodríguez Silva, caído en Malvinas). Por el Club Argentino de Servicio 2 de Abril colocaron la palma su Presidente Juan Baliani y el Secretario Juan Carlos Pirali. En representación del Sindicato de Empleados Municipales Julia Milano y Guillermo Molina.

El Presbítero Maximiliano Turri señaló: “Tras su manto de neblinas, no las hemos de olvidar. ¡Las Malvinas, Argentinas! Dice la marcha que cada día, como hoy, cantamos. La cantamos mientras nos vamos olvidando alguna que otra estrofa en el camino, y proclamamos que nos las hemos de olvidar.

Nos hemos impuesto a no olvidarlas. A darnos cuenta que por más que pase el tiempo la memoria no puede llenarse de neblinas. Porque es ésta la peor deshonra para ellos. Para aquellos 649 héroes que defendiendo la patria derramaron su sangre. No las hemos de olvidar. ¡Las Malvinas, Argentinas!

No podemos olvidar ese territorio que nos pertenece. Pero por encima de la tierra que ellos regaron con su vida, no podemos, no debemos y no queremos olvidarlos a ellos. Los héroes que no volvieron. Aquellos que sabiendo que iban a enfrentar la muerte, se lanzaron con la convicción de dar la vida sin más reparo que defender lo que nos pertenece. No las hemos de olvidar. ¡Las Malvinas, Argentinas!

La sangre derramada de nuestros héroes nos lo recuerda. Y la neblina del olvido no nos tiene que hacer olvidar al Capitán Gustavo García Cuerva y al Soldado Conscripto José Luis Rodríguez. Por ellos y por todos los demás héroes.

Gloria a los muertos en Malvinas y honor a los que volvieron con vida”.

Franco Fontana (hijo del Ex Combatiente Daniel Fontana), dio lectura a un poema.

Por último en representación del Club Argentino de Servicio 2 de Abril, la Secretaria de Cultura María Susana Andera expresó “agradezco a las autoridades del Club Argentino de Servicio 2 de Abril, el haberme asignado la responsabilidad de expresar ante ustedes hoy, las palabras de homenaje en la recordación del Día del Veterano y los Caídos en la Guerra de Malvinas.

Apelé a la  lectura de dos autores, sobre el tema, el escritor Juan Pedro Lumerman, quien historiando los años recientes de la Argentina titula un capítulo de su Historia Social Argentina, De la derrota económica a la derrota militar y nos relata algo que muchos de nosotros vivimos atónitos cómo la Argentina entró en una guerra. Una guerra iniciada sobre la base de un diagnóstico erróneo de la situación internacional y de la falsa evaluación de alianza que convertiría al gobierno militar en el causante de la derrota militar más importante que vivió el país en el Siglo XX.

El episodio de Malvinas operó sobre una causa arraigada en la Nación. Malvinas sintetiza el valor de autoafirmación ante la prepotencia imperial, que ocupó ese espacio incorporado en la conciencia, quizás con mayor fuerza que la penetración del imperialismo británico en el plano económico.

Asimismo, la guerra de Malvinas aquilató el patriotismo de muchos argentinos que entregaron su vida en el Atlántico Sur.

Con relación a ello, el ex Canciller Dante Caputo publica  una reflexión donde señala que la decisión de la dictadura produjo el mayor retroceso en la reivindicación argentina sobre las Islas Malvinas, Georgias y Sandwich de Sur. Para la mayoría del mundo la comprensión de los hechos era sencilla, una dictadura militar en caída libre había recurrido a la archiconocida receta de la soberanía como causa común, que borra las diferencias internas, reúne a los habitantes en un solo sentimiento nacional y esconde a los déspotas de sus crímenes.

Remontar este retroceso costó y costará mucho. Aquí cabe reafirmar que reivindicamos la vía diplomática como único camino de recuperación. Hubo en esos días muestras de valor que la insensatez criminal de la decisión no puede ocultar. Hubo hombres valientes que pelearon y que deberían ser nuestro orgullo. Héroes callados, como el que nos recuerda el ex Canciller, el entonces mayor de la Fuerza Aérea Argentina Luis Alberto Puga. Un misil impactó su avión. Logró eyectarse y permaneció eternas horas en las gélidas aguas del Atlántico Sur. Luego de sobrevivir, se reincorporó al combate. El nunca lo relató, sí lo hicieron sus compañeros sobrevivientes. No todos corrieron su suerte de supervivencia.

Aqui digo que recorriendo distintas ciudades, veo en sus plazas los placarios donde se homenajean a los héroes anónimos de la guerra, Dolores no tiene héroes anónimos. El Soldado Conscripto José Luis Rodríguez y el Capitán Gustavo García Cuerva no son para nosotros héroes anónimos de esta guerra y su memoria es recordada en este acto, en presencia de sus familiares y de los ex combatientes presentes, a quienes  me honro en saludar.

A pocos días en nuestra ciudad, un grupo de corajudos decidió fundar un Club Argentino de Servicio y bautizarlo 2 de Abril. Aunque esta es otra historia, quiero homenajear aquí a los fundadores, porque tuvieron la capacidad de reflexión para expresar con este acto un gesto de soberanía, que no fue un pequeño gesto, sino que cundió a lo ancho del país, por eso, a 35 años merece también recordarse.

Nuestros muertos nos unen, así como la derrota. Los héroes que debemos celebrar así como la ambición de recuperar un territorio usurpado. Deberemos recuperar este sentimiento. Ni usarlo, ni menospreciarlo.