Ante una numerosa cantidad de vecinos continuaron los Reconocimientos en el Archivo Histórico Municipal. Los mismos fueron llevados a cabo por el Intendente Camilo Etchevarren y el encargado del Archivo Juan Carlos Pirali.
El primero de los homenajeados fue el Veterinario Horacio Pereyra, que comenzó su actividad profesional en el año 1965 en General Conesa. Al año y medio se radicó en Dolores en calle Rico y posteriormente en calle Buenos Aires hasta su retiro en el 2014. Pereyra contó que también trabajó en el Matadero y en el Frigorífico Casasa. Señaló que en los comienzos de su actividad era muy difícil comunicarse con los clientes que vivían en el campo, la telefonía celular facilitó ese inconveniente que generaba no poder concurrir en los momentos que era necesario. Recordó que en aquellos tiempos sólo había tres veterinarios en Dolores y como dato señaló que hoy hay más de 40.
Posteriormente fue reconocido el Mecánico Osman Benjamín Herrera, oriundo de Benito Juárez, radicado en Dolores desde muy pequeño. Trabajó en varios talleres como empleado y desde 1953 lo hizo en forma independiente. A los 79 años y 65 en el oficio todavía sigue haciendo algunos trabajos en su taller de Moreno Nº 754. Se definió como un Mecánico de autos viejos y como dato anecdótico recordó que sufrió un accidente trabajando durante un Viernes Santo, motivo por el cual dejó de hacerlo en esa fecha.
El tercero de los homenajeados fue el Odontólogo Abel Blancuzzi. Su abuelo llegó a Dolores en el año 1887. En 1935 su padre se recibió de Odontólogo y él se casó con una Odontóloga, tuvieron tres hijos, dos varones y una mujer, todos son Odontólogos. “Somos una familia de dentistas”, dijo risueñamente Blancuzzi, que recuerda que se recibió en 1954. Atendió durante 43 años, jubilándose en el 2007. Agradeció el Reconocimiento al Intendente y a Juan Carlos Pirali.
Por último se reconoció al Mecánico Edgardo Lahitte. Señaló que el tema de los fierros siempre le interesó, tal es así que los viernes cuando iba al Colegio Nacional se escapaba para ir a trabajar a una herrería, lo que le valieron varias amonestaciones, por lo que tuvo que dar libre las materias de ese año. Al terminar sus estudios secundarios trabajó de camionero, posteriormente lo hizo en la agencia Fiat en la venta de repuestos y de la Concesionaria lo enviaron a perfeccionarse a Buenos Aires. Lahitte recuerda que al volver a Dolores con Fiat hizo el primer servicio en ruta. “Quería independizarme, con ahorros y prestamos puse mi primer taller de electricidad”, dijo el mecánico, que posteriormente se asoció con José María Bianchi para poner un taller en calle Chascomús y en Los Sauquitos. Tuvo taller también en Esquina de Crotto y en la Shell de Al Ver Verás. Con los años pudo comprar su casa, donde vive actualmente y funcionó su taller hasta el cierre. Dejó algunas frases sueltas muy importantes como “me fue bien porque hice todo con mucho amor y respeto por el prójimo”, “no tiene mucha importancia tener mucho o poco, lo importante es vivir tranquilo”. Tiene como frase predilecta “gracias a la vida que me ha dado tanto”. El Mecánico además incursionó en el automovilismo deportivo donde se destacó como preparador y acompañante, sobre esta actividad contó varias anécdotas que fueron seguidas muy atentamente por el público presente.
En el cierre el Intendente agradeció la presencia de familiares y amigos de los mismos, señalando “es muy lindo poder estar con ustedes reconociendo dos Mecánicos, un Veterinario y un Odontólogo. Ellos han hecho lo que les gustaba y eso tiene un gran valor. Estos homenajes son una caricia al alma, que reciben quienes son homenajeados por su trayectoria”.